Lady Gaga ha querido pasar su convalencia sentada en una joya sobre ruedas y para ello no ha tenido mejor idea que encargar a la joyería Mordekai de Nueva York una silla de ruedas bañada en oro. La cantante nos ha mostrado en una imangen publicada en su perfil de twitter la joya que ha bautizado con el nombre de Emma.
El joyero Ken Borochov, de la joyería Mordekai, fue el encargado de realizar el regalillo, una sillas de ruedas bañada en oro de 24 quilates, con asiento cubierto en piel negra y una llamativa sombrilla, que tiene la particularidad de que se puede declinar 180 grados. El joyero, en una entrevista mantenida con The New York Post confesó que "no esperaba esa llamada y nunca me habían encargado una silla de ruedas, pero siempre estoy dispuesto a los nuevos retos y me encantó poder fabricar una silla que he llamado 'chariot' y que es digna solo de una reina».
El joyero tuvo que realizar el encargo en una semana y para llevarlo a cabo se inspiró en el trono de una reina y en la chupa de un motero.
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